Hola amigos!!

Bienvenidos a todos un mes más a mi blog. Hoy es un día un poco raro ya que el mes pasado y este tienen una gran diferencia… la vuelta a la rutina. ¿Alargabais el veranito un tiempo más? Yo desde luego que sí. Dejando a un lado los bajones post vacacionales os cuento que hoy os traigo una Berlín diferente a la del otro día. Con todos ustedes y para alegraros un poco la horrible vuelta a la vida real llega (imaginaros un redoble de tambores de estos ensordecedores)… La Berlín más bonita.

Si el otro día os enseñé la parte más histórica y reflexiva de esta ciudad hoy os voy a enseñar la parte más bonita y fotogénica de la misma.

En primer lugar nos movemos a la puerta de Brandeburgo que es, al menos para mi, el monumento más representativo de Berlín.

A pesar de que no es la única ciudad que posee puerta, Madrid por ejemplo tiene la suya (La puerta de Alcalá), esta es sin duda una auténtica preciosidad. Los caballos de la parte superior, el propio ambiente que hay ante sus pies en la misma plaza o la maravillosa iluminación con la que cuenta la hacen única. Por aquí os dejo un par de fotos para que veáis un poco a que me refiero sobre todo con lo de la iluminación.

Siempre es buen momento para tomarse un Currywurst, plato típico Alemán. Así que, aprovechad los puestecillos que hay por la plaza para hacerlo (no todos los días se come delante de esta maravilla de sitio ¿no?).

Además en dicha plaza, justo en frente a la puerta, se encuentra el hotel Adlon. Este hotel tiene una anécdota increíble. Resulta que el mismísimo Michael Jackson en un “encuentro con sus fans” y dejándose llevar por el entusiasmo sacó a su hijo, de a penas 1 año, por la ventana con el rostro cubierto con un pañuelo blanco y lo balanceó para enseñárselo a sus seguidores. Después de esta acción el cantante pidió perdón, ya que se lió una buena, y dijo que se dejó llevar por la adrenalina. Mirad, mirad…

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Después de este show nos vamos al Reichstag. Este edificio es el lugar de reunión de la Asamblea general, cada 5 años, y del parlamento Alemán. Durante la batalla de Berlín sufrió daños que posteriormente se solventaron en las dos restauraciones que se hicieron en 1960 y 1990.

Lo mejor es la cúpula, a la cual puedes subir y te recomiendo que lo hagas. Eso sí, recuerda que debes reservar tu cita a través de internet y estar allí puntual. A tu disposición encontrarás una audio guía que recuerdo bastante útil y amena y como no, unas vistas y un lugar que se quedarán en tu memoria para siempre. También puedes tumbarte a sus pies simplemente a disfrutar del panorama. Algo que hace mucha gente, es traerte su bocata y cenar en la hierba, desde luego, ¡un planazo! (no vale quedarse dormido eh).

El siguiente destino es Alexander plazt. Como ya os expliqué en el anterior post esta es una plaza, ni más ni menos, la plaza principal de la ciudad. Tanto para ver el reloj mundial y la torre de la televisión, como para moverte a casi cualquier punto de Berlín e incluso para hincharte a comprar souvenirs este lugar es perfecto.

Hablando de la torre de la televisión o Fernsehturm en alemán (ya os digo yo que este idioma es un tanto extraño), nos vamos para allí. Ubicada como ya os he dicho en la plaza y desde la cual puedes ver casi todos los distritos de la ciudad, es otro de los monumentos por excelencia de la ciudad. Yo, que subí, os recomiendo hacerlo porque merece mucho la pena. Es de estos sitios a los que sí o sí has de subir tipo (London Eye o Torre Eiffel).

Ahora nos vamos al que es sin duda alguna uno de mis sitios favoritos de todos los que hemos visto y vamos a ver de aquí, la catedral. Esta es parada fundamental si venís. Aunque solo sea para verla por fuera merece la pena. Es PRECIOSA, y lo mejor, es que justo delante de ella hay unos jardines en los que puedes acostarte a disfrutar de ella (debe ser un clásico aquí tirarte a mirarlo todo desde el suelo). La fachada está un poquillo mal conservada pero aún así es mágica. Y, por si fuera poco, justo a su lado se ve la torre de la televisión lo que te permite sacar un auténtico fotón 2 en 1. De verdad, no perdáis la oportunidad de verla.

Siguiente parada… fuente de Neptuno. No sé por qué pero casi todas las ciudades parecen tener una fuente de Neptuno (Roma, Bolonia, Florencia…). Esta fuente en mi opinión no es increíble pero a su alrededor las vistas son impagables. Desde un punto de la fuente puedes verla acompañada de la torre de la televisión (que si, que es omnipresente, lo sé) y caminando un poquito hacia la plaza tienes otra fuente, puramente decorativa que esconde tras ella la catedral. Os dejo por aquí las dos perspectivas, la segunda es sin duda alguna el fotón del viaje.

Y por último, el lugar secreto. No es nada espectacular, es tan solo un sitio desde el que sacar una foto especial. Si una imagen dice más que 1000 palabras, este es el claro ejemplo, así que aquí os la dejo y me guardo el comentario (que cada uno vea la belleza de la foto a su manera). Solo decir, que la iglesia de detrás es la iglesia derruida; para saber más leer el post.

Y hasta aquí por hoy. Espero que lo hayáis disfrutado, que os haya inspirado para empezar la vuelta a la rutina de la mejor forma posible y que me dejéis en los comentarios cuál ha sido el sitio que más os ha gustado o, si ya habéis ido, si en vuestra opinión falta alguno por nombrar.

Un abrazo gigante y nos vemos el mes que viene.

LUGAR	HORARIO	PRECIO
Reichstag	Todos los días, 8-24	Gratuito
Torre de la televisión	Marzo a Octubre, 9-24 Noviembre a Febrero, 10-24	Adultos, 16,5€ Niños menos 4 años, gratuito Niños entre 4 y 14 años, 9,5€
Catedral	Del 1 de Abril al 30 de Noviembre: Lunes a Sábado, 9-20; Domingos y festivos, 12-20. Del 1 de Octubre al 31 de Marzo: Lunes a Sábado, 9-19; Domingos y festivos, 12-19.	Adultos, 7€ Estudiantes, 5€