Hola amigos!!

Bienvenidos un mesecillo más al blog… Como os prometí el mes pasado hoy os traigo un nuevo destino (mmm me encanta esto de tener tanta variedad por aquí). Antes de desvelaros cual es quería decir que me hace especial ilusión hablaros y recordar este lugar ya que me sorprendió muchísimo y me quedé totalmente enamorada de él. Su sonoro idioma, sus indescifrables palabras, su difícil de entender metro y su gran historia que contar hacen que esta ciudad goce de un encanto absolutamente único e irrepetible que solo encontrarás justo aquí. Una vez dicho esto, os doy la bienvenida a… Berlín!!

Berlín es una ciudad diferente a las que he visto anteriormente ya que “todo lo que se debe visitar” se encuentra más o menos en una misma zona. Sobra decir que se trata de una ciudad grande, no es Coruña por ejemplo, por lo que cerca puede significar unas cuantas paradas en metro o una buena y cansada caminata. Por eso no veía lógico hacer una narración cronológica ya que hay zonas por las que pasé 3-4 veces y sería muy cansino mencionar lo mismo todo el rato ¿no creéis?. Dicho esto…

¡EMPEZAMOS!

Hoy vamos a hablar de la Berlín más histórica.

¿Quién no ha oído hablar del famoso muro de Berlín?… Este muro fue un muro de “seguridad” durante la Guerra fría o época de división alemana. Separaba a dos berlines muy diferentes, diferentes en cuanto al sistema político sobre todo. La caída de este se produjo en 1989 poniendo fin a esta guerra interna.

Hoy, años después, este muro es un museo al aire libre. Un museo que alberga pinturas urbanas y recibe el nombre de East Side Gallery. Lógicamente quien visite la ciudad debe ir porque, a pesar de que no es lo mejor, es necesario verlo y con ello ser consciente de toda la gente que murió a causa de este muro. Por aquí abajo os dejo fotos de las pinturas más importantes que en algunos casos resaltan momentos históricos importantes.

El famoso beso entre Leonid Brezhenev (entonces Secretario General de la UniónSoviética) y Erich Honecker (Presidente del Consejo de Estado de la República Democrática Alemana).

El Trabant que simbolizaba los coches que tenían la población durante la guerra ya que eran los que económicamente estaban a su disposición.

Esta fue la primera pintura del muro y representa figuras monstruosas humanas que representaban la violencia de la situación de entonces.

Y de un monumento que nos hace recordar a otro… el Holocausto. Un monumento en memoria a los judíos de Europa asesinados, como su propio nombre indica, en el Holocausto. Fue diseñada por un arquitecto y un ingeniero y el monumento en sí es bastante sugerente. Sugiere recuerdo, melancolía… El recuerdo de tantas y tantas personas asesinadas injustamente por sus creencias. Todo turista que haya pasado por Berlín no se va sin verlo y vosotros no seáis menos. Merece mucho la pena, aunque solo sea como señal de respeto hacia la gente a la que homenagea.

Nos vamos a otro sitio. En este caso nos movemos a Alexanderplatz que es la plaza principal de la capital alemana y el centro de reunión y lugar de celebración de multitud de actos, supongo que en gran medida por su buena comunicación de buses, tranvías y trenes. Aquí podemos encontrar el reloj mundial. Es uno de los puntos más transitados de la ciudad y permite ver la hora de todas las zonas del planeta. Es bastante curioso y como vais a pasar por esa plaza SI O SI os recomiendo que os paréis y le echéis una ojeada.

De un reloj enorme pasamos a un punto de paso muy conocido. Este es Checkpoint Charlie. Y cuando digo punto de paso es porque este era el lugar por donde, durante la Guerra Fría, los berlineses podían conseguir el visado para cruzar a Berlín Este desde Berlín Oeste. Además es muy probable que os suene de verlo en películas como El espía que vino del frío, Octopussy o Goodbye, Lenin.

A escasos metros está también su museo que, salvo que tengáis mucho tiempo, no os recomiendo visitarlo (es algo aburridillo).

La Berlín más histórica… ¡Si chicos! Historia son museos también, como no. Berlín está bastante cargadita en este campo también. Si os gustan y queréis echar un ojo a unos cuantos os recomiendo la isla de los museos, en la que se reúnen gran parte de los museos de la ciudad. He de confesar que, aunque me gustan, no soy la fan número uno de ellos pero os invito a visitar 2, que son los que vi yo y que me gustaron: Pérgamo y Bauhaus.

En Pérgamo os encontraréis antigüedades como el Altar de Zeus, la Puerta de Isthar, un modelo de la torre de Babel y una copia del código de Hammurabi. El edificio para variar es alucinante (no sé por qué pero los edificios de los museos siempre son muy molones). Eso sí, os espera una cola curiosa. Lo bueno es que por la zona hay puestecillos de venta de refrescos (parece una tontería pero para cuando os estéis muriendo de aburrimiento y sed acabaréis amándolos). Aprovecho el momento para contaros una anécdota que acabo de recordar y que, no tiene desperdicio. Yo fui a Berlín en pleno auge de la moda POKEMON GO. Entonces, mientras esperabamos la cola, la pareja que teníamos delante, se pasó las 2h de espera cazando zubats y agitando el móvil para abrir los huevos de pokemon. Os prometo que la cola se nos pasó volando de lo que nos reímos y lo que nos entretuvo su caza.

Y Bauhaus que es un museo de arte en el que veréis obras innovadoras y diseños totalmente abstractos. He de decir que a pesar de que está muy bien y más si coges la guía gratuita que te ayuda a entenderlo todo mejor, pagas 12 Euros por una exposición que tardas en ver «5 minutos» por eso mi consejo es que vayas si te gustan ese tipo de museos. Aún así es curioso y divertido y no me arrepiento de haberme pasado por ahí. Aquí estaba prohibido sacar fotos por lo que no tengo nada para que tengáis de referencia pero, para que os hagáis una idea, es básicamente arte contemporáneo.

Y por último nos trasladamos hasta la iglesia derruida o iglesia memorial Kaiser Wilhelm que fue bombardeada en la Segunda Guerra Mundial y que se tomó la decisión de crear un monumento conmemorativo con sus restos para recordar la insensatez de la guerra y que a través de ella solo se consiguen daños humanos y daños arquitectónicos. Es muy bonita, desde luego su aspecto te hace darte cuenta en un golpe de vista para qué está allí y ya os digo que merece mucho la pena visitarla por su belleza y su historia.

Pero oíd chicos, que esta historia de la iglesia no acaba aquí eh… Hace menos de un año, el 19 de Diciembre de 2016, se produjo aquí, a los pies de esta iglesia un atentado terrorista en el que murieron 12 personas al ser arroyadas por un camión en el mercado navideño que se monta delante de dicha iglesia.

Este es otro motivo por el que ir a verla, un motivo más para recordar que la ira y el ansia de matar y destruir no lleva a nada más que a cosas malas. En memoria a esa gente fallecida durante ese primer bombardeo, a esa otra victima del ataque terrorista y a todos aquellos que han sufrido la injusticia del terrorismo no olvidéis recordar toda su historia cuando paséis por aquí.

Y hasta aquí el primer paseíllo por Berlín. El mes que viene veremos la Berlín más bonita y disfrutaremos de otro rato genial tú y yo, aquí, donde siempre…

Obviamente dejarme en comentarios todas vuestras opiniones o simplemente lo que os apetezca contarme y como no…

Un abrazo gigaaante y hasta la próxima.

LUGAR	HORARIO	PRECIO
Pérgamo	Jueves, 10-20 Resto de días, 10-18	Adultos, 19€ Estudiantes, 9,5€